Es una decisión bastante importante cara al usuario, pues supone un gran cambio al pasar a otro entorno de escritorio diferente. También hay que aclarar que esta decisión aún no es definitiva. Los desarrolladores se volverán a plantear si volver a incluir GNOME al llegar al estado freeze, de congelación, el estado preliminar a sacar la próxima versión donde solo se corrigen bugs.
Las principales razones de este cambio, según el desarrollador Joey Hess son:
Soporte de accesibilidad, en particular para discapacitados visuales.
Xfce se asemeja más a la experiencia GNOME 2.
Restricciones de espacio del CD.
¿Y vosotros que opináis? ¿Os sorprende esta decisión? ¿Estáis de acuerdo con ella?
Fuente: Ubuntizando
No estoy de acuerdo con el cambio. Xfce tiene el gran inconveniente de que está basado en GTK 2, ¿qué pasará cuando deje de haber soporte? ¿se pasaran a GTK3? ¿o por el contrarío se cambiaran a Qt? En cualquier caso si hacen el cambio, que deduzco que será más pronto que tarde, será un entorno con muchos cambio que propiciarán que haya bugs, por contra Gnome cada vez es más maduro y estable.
ResponderEliminarSi detrás de este cambio hay motivos políticos, como llevar la contaría a Red Hat para no adoptar systemd o Wailand, no me parecen correcto, ya que lo importante son los usuarios.
Si el cambio es sumamente estético, tampoco estoy de acuerdo, ya que si comparamos KDE, Gnome (incluyendo esos iconos tan feos que trae), e incluso Windows, vemos como Xfce parece del siglo pasado, y si, contentará a los más veteranos, pero con este entorno (por lo menos tal como viene de serie) no creo que conquisten a nuevos usuarios. Es verdad que Debian su política es la estabilidad y los profesionales, pero aun así Xfce es demasiado tosco.
Los motivos que dan este hombre no me parecen suficientes como para hacer un cambio tan grande, espero, y así lo creo, que los responsables de Debian mediten correctamente su decisión y que los motivos del cambios sean los suficientemente trascendentales como para adoptar ese cambio y que no haya motivos políticos, de cabezonería o estéticos.
Un saludo.