Chapeau

 Después del buen sabor de boca que me dejo LinuxMint, he decido probar con otra distribución de las fáciles. Y en este caso abandono los deb para probar una basada en Fedora, llamada Chapeau.

 Chapeau es una distribución en la cual se facilita la instalación de Fedora y sobre todo la post-instalación, ya que viene de serie con todos los codecs para reproducir audio y vídeo y que la distribución madre, en este caso Fedora, no los trae de serie por motivos legales o morales. En este caso provee el repósito RPMFusion, Dropbox, Steam, Adobe Flash y Oracle VirtualBox. Es decir, viene montada para tener todo a un golpe de click.

 Como en su distro madre, Chapeau nos provee la ultima versión de Gnome Shell, pero con unos iconos llamados Moka & Faba. Aquí podéis ver todos los cambios que incorpora con respecto a Fedora. Asi que sin pensarlo mas voy a intentar instalar esta distribución en mi ordenador, junto con Debian, para probar como se comporta.

 Debo decir que en modo Live me ha parecido muy lento el arranque, llegue a pensar que se había quedado congelado la máquina. Pero no, al final pude probar la distribución en modo Live. Me llama la atención poderosamente el renderizado de las fuentes al no ser del todo bueno y también por que son algo pequeñas para mi gusto. Tampoco me convencen mucho el set de iconos, pero esto es cuestión de gustos. Como todo parece funcionar a la perfección voy a proceder a la instalación.

 El instalador es el mismo de Fedora, como no, llamado Anaconda. Me resulta algo extraño este instalador, ya que no es el típico de Siguiente, Siguiente y puede llegar a ser algo confuso en algún momento y no es del todo amigable, sobre todo a la hora de particionar los discos duros. Ya comenté esto mismo en esta entrada sobre la instalación de Fedora 21.

 Una vez salvado el escollo de la partición de los discos duros el resto de la instalación es un coser y cantar.

 Una vez iniciado el sistema por primera vez nos aparece un pequeño asistente que nos preguntará entre otras cosas el idioma y el idioma del teclado, ¿otra vez?. También nos preguntará si queremos conectarnos alguna cuenta en línea. Esto está muy bien, pero sólo podemos conectarnos a cuatro, lo cual es algo escaso.

Que nos pregunte por la privacidad es mi opinión es siempre positivo.

 Cuando hayamos acabado con esto, nos aparecerá una pantalla donde se pueden ver tres tutoriales de como manejar Gnome Shell. Los tutoriales son muy básicos, pero la idea está muy bien para la gente que por primera vez se enfrenta a Gnome Shell.

 Chapeau nos brinda de serie los programas mas usados por la gran mayoría de los usuarios. Para navegar Firefox, correo Evolution, fotos Shotwell, vídeo VLC, música Música (que evidente, ¿no?), para jugar Steam, para los programas de Windows Play on Linux,  y para editar fotografiás, como no, Gimp, entre otros. Desde luego la cantidad de software que trae es abundante. Pero ¿y si quiero otro programa? Pues hay que echar mano de Software. Así sin más. El nombre no es que sea demasiado descriptivo, pero sirve para instalar programas.

 Se ve bonito e intuitivo, pero tiene un gran problema, hay muy pocos programas, por lo tanto tenemos que echar mano del terminal para instalar programas, lo cual no es demasiado intuitivo para un usuario novel. O también podemos usar Yum Extender (supongo que le cambiaran el nombre), un programa para instalar programas.

 Como se puede ver en la captura, el viejo y veterano Yum ahora es sustituido por DNF. Si queréis saber como usar este nuevo gestor de paquetes, aquí os lo explican muy bien.

 Después de estar unas horas delante del ordenador me acordé de algo que todo buen linuxero no debería olvidar tan fácilmente: las actualizaciones. ¿Es posible que no haya actualizaciones? Me parece realmente difícil, así que vuelvo a echar mano del terminal y esto es lo que me encuentro.

 ¿Pero no se supone que es una distribución para usuarios nóveles? Pues echar mano del terminal para actualizar no es que sea muy intuitivo, aunque para que vamos a engañarnos, tampoco es tan difícil, simplemente hay que teclear:

sudo dnf upgrade

 Pero si algo tiene que salir mal, saldrá mal. Y es que me encuentro un error al finalizar la descarga y no se puede actualizar. Mal vamos. Menos mal que me encuentro la solución en el foro de Chapeau, tan sólo tecleamos lo siguiente en el terminal:

sudo dnf --refresh --disableexcludes=kodora update chapeau-repos

 Seguimos adelante comprobando como se comporta el sistema. Ahora toca comprobar si se puede conectar con la Raspberry Pi a través de Samba. Y me doy de bruces, no se cual es la razón pero no me encuentra la Raspberry. Un punto negativo.

 Otro punto negativo. No se por qué pero cada vez que abro Archivos (Nautilus) los iconos me aparecen gigantescos y por más que le cambio en las opciones que los iconos sean más pequeños, cada vez que vuelo abrir Archivos me vuelven aparecer grandes, y no me gusta.

 No he tenido problemas para reproducir mp3, lo hace a través de Rhythmbox, ni para reproducir archivos de vídeo, lo hace a través de VLC.

Conclusión:

 Las comparaciones son odiosas, lo se, pero en este caso creo que tengo que hacerlas, ya que se supone que Chapeau se mueve en el mismo ambiente, o por lo menos esa es la intención, que distribuciones fáciles como LinuxMint o Ubuntu. El arranque es lento, no se cual es la razón pero tarda más en arrancar que LinuxMint o incluso Debian.

 El comportamiento es correcto, siendo el sistema muy fluido, incluso con programas que suelen tener un arranque más lento, como Evolution o Firefox. No he notado ralentizaciones ni pequeños cuelgues o congelamientos.

 En el aspecto estético no tengo mucho que decir, ya que son cosas más bien personales, pero sigo diciendo que las tipografías son algo pequeñas, aunque esto tenga la clara ventaja de dejar más sitio a los programas.

 Lo que si debería mejorar y mucho, es sin duda en esos detalles que pueden hacer que no sea una distribución del todo amigable. Uno es, sin duda, a la hora de instalar software, y aunque Yum Extender es un gran programa, no es agradable a la vista. Otro tema son las actualizaciones, que no haya un gestor de actualizaciones de forma gráfica creo que es imperdonable.

 Un punto a favor es sin duda que venga con los repósitos no libres ya cargados, lo cual nos ahorrará trabajo.

 La cantidad de software que trae preinstalado es muy abundante, a algunos les parecerá mucho, pero desde mi punto de vista está muy bien.

Como punto final debo de decir que intentar hacer un Fedora mucho más amigable es sin duda una labor encomiable, pero también debo decir que aun le queda un largo camino que recorrer. Aun a pesar de los pequeños fallos me parece una distribución a tener en cuenta.

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